¿Qué son las aulas virtuales y cómo apoyan la operación de las empresas?

La tecnología avanza día a día, y con ella la aparición de herramientas que apoyan el desarrollo de las operaciones de las empresas. Una de estas herramientas que se han generado en los últimos años son las aulas virtuales.

Pero ¿Qué son las aulas virtuales y cómo apoyan estas al desarrollo de las operaciones de las empresas?

Adrián Morazán, socio fundador de Simetría Digital y experto en Procesos de Digitalización, explicó que las aulas virtuales son una herramienta digital que tiene como objetivo crear un ambiente en donde las personas accedan y desarrollen una serie de acciones que son propias de un proceso de enseñanza presencial. Como lo es leer documentos, realizar ejercicios, formular preguntas, trabajar en equipo, solo que en un espacio virtual.

Entre sus beneficios, resalta el experto, están que las organizaciones que implementan esta herramienta pueden ampliar sus servicios o sistemas de educación a cualquier área geográfica. Esto porque las aulas virtuales pueden ser accesadas desde cualquier lugar.

Además, se rompe la barrera del mínimo. Esto significa que con una sola persona que reciba la capacitación empresarial es suficiente, por lo que no se rompe la necesidad de formar un grupo con un mínimo de personas para abrir ese curso.

Asimismo, se amplía el acceso a cualquier persona, ya que las aulas virtuales utilizan sub-herramientas como subtítulos. Además de videos con posibilidad de incluir comunicación en Lesco, entre otros. También genera la flexibilidad de horarios, ya que los usuarios se pueden conectar a la hora que mejor les convenga a ellos.

Necesidades que solucionan aulas virtuales

Morazán comentó que entre las necesidades que las aulas virtuales llegan a solucionar es el contacto directo con los capacitadores. Esto, afirma, porque son el lugar idóneo para realizar preguntas.

“De hecho, son una de las vías utilizadas por las plataformas e-learning para involucrar a la persona que aprende y fomentar la interacción. También otra necesidad que solventa es la disponibilidad de contenidos, siendo muy fácil acceder a ellos de una forma rápida y sencilla”, considera Morazán.

Añadió que, a pesar de estos beneficios, las aulas virtuales en el país aún son poco utilizadas por las organizaciones. En este sentido, los principales avances que se han dado son a nivel de instituciones internacionales como la Unicef, por ejemplo.

Para el socio fundador de Simetría Digital, para impulsar el uso de aulas virtuales en organizaciones del país, el primer paso que se debe dar es que se genere un interés de las empresas en la capacitación de su equipo.

“Esa es la motivación. Ya puntualmente el proceso de implementación es muy dinámico, puesto que se realiza por medio del uso de metodologías ágiles en pro de transformar a digital lo que se quiere comunicar”, dijo el experto en Procesos de Digitalización.

Oportunidades en Costa Rica

Morazán añadió que en Costa Rica existen diversas oportunidades para el aprovechamiento de este tipo de herramientas por parte de empresas y profesionales.

En su opinión, para las empresas es una herramienta que facilitará los procesos de capacitación de personal. Mientras que, para los profesionales, las aulas virtuales les abren la posibilidad de generación de nuevos ingresos. Esto último porque muchas personas, de manera independiente, pueden empezar a transmitir y comercializar sus conocimientos.

El experto añadió que también, a nivel de recursos humanos, les permite ahorrar tiempo y recursos en su proceso de inducción a la empresa.

Asimismo, las aulas virtuales llegan a contribuir a profesionalizar el recurso humano de las organizaciones. Esto porque impulsa el acceso de personas que no tienen posibilidad de estudiar o acceder a cursos y charlas que serían de provecho, porque se da en horarios de trabajo.

“La educación virtual permite el acceso en distintos horarios, facilitando la capacitación. Debido a esto, las excusas para no capacitarse bajan al mínimo”, afirmó Morazán.

Adicional a esto, las aulas virtuales generan data para el análisis por parte de la empresa. Entre ella, se generan informes, por ejemplo, de las horas en que se conectan los usuarios. Además, cuánto en promedio duran conectadas, hasta qué punto del curso avanzan. También desde donde se conectan.

“Todo eso permite finalmente evaluar no solo el uso que se le da a las capacitaciones. Sino su efectividad. Esto ya que el sistema de evaluación de las aulas virtuales también se puede monitorear”, concluyó Morazán.

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