20 mayo, 2024

Reflexiones sobre la inflación y el tipo de cambio locales

Lectura:

Vidal Villalobos, asesor económico de Grupo Financiero Prival

Por: Vidal Villalobos, asesor económico de Grupo Financiero Prival.

La inflación de nuestro país ha sufrido un importante ajuste al pasar de un 12,15% en agosto del año pasado a un -3,28% en agosto de este año. Específicamente, la inflación subyacente interanual es de 0,5%. Esto debido a la importante alza en la Tasa de Política Monetaria que realizó el Banco Central.

También, esto se manifestó en el Índice de precios del productor de la manufactura. Este presentó una variación interanual de -5,0% en agosto último. Ello sugiere una menor presión por empuje de costos sobre los indicadores de inflación al consumidor final.

Los modelos de proyección del Banco Central señalan que la inflación general, en lo que resta del 2023, mostrará variaciones interanuales cada vez menos negativas. Además, ingresará al rango de tolerancia alrededor de la meta en el primer semestre del 2024.

Las expectativas de inflación generadas a partir de la encuesta del Banco Central y las estimadas con base en la negociación de títulos públicos en el mercado financiero costarricense, se ubican en torno a la meta inflacionaria. La meta de mediano plazo en materia de inflación por parte del banco se mantiene en un 3%.

Por lo pronto, el factor de riesgo que mayor incidencia podría tener en un alza en la inflación lo es el reciente aumento en el precio del petróleo. El cual fue provocado por el recorte de la producción de la OPEP.

Inflación en el informe sobre TPM

En su más reciente informe sobre la TPM, el Banco Central señaló varios temas. Dentro de ellos, se destacan:

1. La inflación general y el promedio de indicadores de inflación subyacente continuaron por debajo del límite inferior del rango de tolerancia alrededor de la meta de inflación (3,0% ± 1 p.p.).

2. La rebaja en la inflación se explica por la reducción del precio de hidrocarburos y de los costos de transporte. Así como el restablecimiento de las cadenas globales de suministros y precios de otras materias primas inferiores a los registrados en la primera mitad del 2022.

3. Además, hay que considerar, el carácter restrictivo de la política monetaria. Ello, a pesar de la reducción en la TPM aplicada entre marzo y julio últimos (250 puntos base).

4. La apreciación de la moneda local que reduce las presiones al alza en los precios de los bienes, principalmente de los importados.

5. El efecto base debido a que el choque inflacionario del 2022 se manifestó con mayor fuerza entre febrero y agosto de ese año.

La inflación futura puede ser afectada por fenómenos de naturaleza climática. O bien, aquellos generados por acuerdos de reducción de la oferta. Por ejemplo, como es el caso de los hidrocarburos. Esto no solo tendría implicaciones directas sobre los precios locales, sino que también influiría, de manera indirecta, en los costos de producción. Así como en el proceso de formación de las expectativas inflacionarias.

A pesar de ello, faltan pocos meses para el cierre del año y no se observan presiones inflacionarias. Esto por lo que al final del año, la inflación podría se negativa o muy cercana a cero.

Otro riesgo al alza es la potencial recomposición del portafolio de instrumentos financieros. Podría generar un incremento abrupto en las expectativas cambiarias.

Sobre el tipo de cambio

En cuanto al tipo de cambio, este mostró durante la primera parte del 2022 un aumento importante. Ello atendiendo al alza del precio del petróleo provocado por la invasión de Rusia a Ucrania. Así como por la salida local de capitales en la búsqueda de mejores rendimientos. Esto sobre todo por parte de las operadoras de pensiones.

Luego, en julio de 2023, el BCCR indicó que su lucha contra la inflación sería frontal por lo que puso en marcha un alza en las tasas de interés.

Hacia el futuro hay fuerzas encontradas. Una con tendencia a mantener la situación actual o a una apreciación adicional. Estas, por ejemplo, se ven en:

  • El repunte en el sector turismo y en exportaciones.
  • La llegada adicional de inversión extranjera directa.
  • La mayor presencia de empresas internacionales en las zonas francas que traen regularmente recursos para atender sus compromisos locales.
  • La llegada de préstamos y colocación de bonos adicionales por parte del Gobierno.
  • La llegada de capitales especulativos.
  • El interés del BCCR de mantener bajo control la inflación.

La otra con tendencia a una ligera depreciación:

  • La rebaja en el premio por invertir en colones que haga atractiva nuevamente la inversión en dólares.
  • El aumento en el precio de las materias primas, en especial los hidrocarburos.
  • La expectativa de que las tasas de interés internacionales relativamente altas se mantendrán por un plazo mayor al originalmente esperado.
  • El interés cíclico y recurrentes de grandes participantes en el mercado de procurar una depreciación del tipo de cambio hacia finales del año por razones contables.

El escenario más posible es que se mantenga la actual condición del mercado cambiario y que se presente una leve depreciación del tipo de cambio.

Más columnas de OPINIÓN aquí.

Dejar comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Suscríbase a nuestro boletín para mantenerse informado.