La Junta Directiva de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) tomó la decisión de ajustar y ampliar las medidas de auxilio financiero a patronos, trabajadores independientes y asegurados voluntarios debido a la afectación que estos han sufrido por la pandemia de COVID-19 en el país.
De acuerdo con el presidente ejecutivo de la CCSS, Román Macaya, la emergencia que se vive actualmente no es solamente sanitaria, sino también económica y financiera, aspecto que se tomó en cuenta a la hora de ampliar y ajustar las medidas de auxilio.
Las medidas anunciadas incluyen ampliar la reducción en la base mínima contributiva, así como medidas transitorias al reglamento que regula la formalización de acuerdos de pago por deudas de patronos y trabajadores independientes con la CCSS y en materia de gestión de cobros, según explicó Luis Diego Calderón, gerente Financiero de la CCSS.
Dentro de las medidas de auxilio destacan la ampliación hasta el 31 de julio del 2020 la reducción de la base mínima contributiva del valor que estaba en febrero 2020. En este sentido, para los patronos esta se mantendrá en un 25%, mientras que para los trabajadores independientes y para los asegurados voluntarios será de un 75%.
Calderón agregó que esta reducción se logra mantener gracias al aporte de ¢8.187 millones que recibió la CCSS por parte del Estado.
Además, los patronos, trabajadores independientes y asegurados voluntarios no tendrán que acercarse a ninguna oficina de la CCSS a hacer el trámite, ya que estas dos reducciones la institución las hace de manera automática.
El gerente Financiero de la CCSS explicó que, respecto a las medidas de cobros, la pretensión institucional es buscar un equilibro que permita proteger la sostenibilidad financiera de la CCSS y ayudar a las personas afectadas, por lo que las medidas aprobadas son:
Prorrogar hasta el 31 de diciembre del año 2020, las ocho medidas transitorias al Reglamento que regula la formalización de acuerdos de pago por deudas de patronos y trabajadores independientes con la CCSS, aprobadas 19 de julio del 2019, las cuales son:
Así mismo, prorrogar hasta el 30 de setiembre del 2020, la suspensión de las gestiones de cobro, únicamente por deudas que se origen durante los meses de febrero a setiembre del 2020.
Específicamente, las gestiones de cobro a suspender son las relacionadas con los siguientes procesos con el inicio y ejecución material de cierres de negocios por morosidad y la presentación de demandas civiles y denuncias por retención indebida.
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