El desempleo en Costa Rica aumentó a un 20,1% entre al cierre de mayo del 2020, según anunció esta mañana el Instituto Nacional de Estadística y Censo (INEC). Esto significa que 468 mil personas en el país no tienen empleo en este momento.
Estos datos se desprenden de la última Encuesta Continua de Empleo (ECE) elaborada por el INEC y que contempla los meses de marzo, abril y mayo del 2020.
Estos dos últimos meses reflejan la afectación en el mercado laboral de las medidas tomadas en el país para contener la pandemia del COVID-19.
La Encuesta también señala que en su medición son las mujeres (26,0%) las que presentan una mayor tasa de desempleo comparado con los hombres (16,03%).
Por su parte, el subempleo, es decir, el porcentaje de las personas ocupadas que trabajan menos de 40 horas por semana y desean trabajar más horas, se estimó en 17,6%, aumentando interanualmente en 8,0 p.p. Por sexo, estos porcentajes se ubicaron en 17,5 % para los hombres y 17,7 % para las mujeres.
De acuerdo con el sector empresarial, este aumento en la tasa de desempleo del país no es una sorpresa debido a la situación que vive el país, la cual se ha endurecido en las últimas semanas.
Para Alonso Elizondo, director ejecutivo de la Cámara de Comercio de Costa Rica (CCCR), a la cifra anunciada por el INEC hay que sumarle además los datos de las personas que tienen su contrato laboral suspendido o una reducción de jornada, lo que provoca una afectación en el empleo aún mayor.
“Urge una reactivación económica, aplicar medidas prontas y certeras para que estos costarricenses recuperen su empleo”, señaló Elizondo.
Por su parte Mayela Rojas, presidenta del Programa Mujer Empresaria de la Cámara de Comercio de Costa Rica, comentó que los datos de la ECE generan una gran preocupación en su sector ya que las cifras del desempleo femenino normalmente son superiores al masculino.
“La actual situación de la pandemia agrava la problemática entre las mujeres en relación a la doble jornada que normalmente ejerce en sus hogares y en sus negocios o empresas”, indicó Rojas.
Para el sector alimenticio, el porcentaje de un 20,1% de desempleo refleja no solamente el problema estructural que tenía el país antes de la pandemia, sino la destrucción de cientos de miles de empleos en solo tres meses de pandemia (marzo, abril y mayo).
“CACIA hace un llamado para la construcción de una propuesta clara, contundente, estratégica y programática de la política económica, con la que se aborden todas las debilidades de la economía nacional en temas como competitividad y reforma estructural del Estado, y al mismo tiempo, diseñar un plan de reconstrucción de la economía que se aplique una vez que se levanten las medidas sanitarias”, concluyó Maurizio Musmanni, presidente de la Industria Alimentaria.
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