Por: David Obando Abraham
Presidente de la Cámara Multilateral de Comercio y Cooperación Israel – Iberoamérica
Las exportaciones son una fuente de riqueza para el PIB de cualquier país, así como una demostración de fortaleza e incluso liderazgo en los mercados de ciertos sectores. Aporta grandes beneficios como el acceso a nuevos mercados, el desarrollo y crecimiento de las empresas, se minimiza la dependencia exclusiva del mercado local, fortalece la competitividad y calidad de los productos y servicios o ayuda a mantener una actualización tecnológica constante. Son grandes exportadores países como China, Estados Unidos, Alemania, Japón, Holanda o Suiza, que engrosan sus arcas año tras año gracias a sus ventas en el exterior. Sin duda, una fuente suculenta fuente de ingresos.
Sin embargo, con demasiada frecuencia, las empresas se topan con espinosos obstáculos a la hora de expandirse al mercado internacional. Desde el desconocimiento y subestimación de los perfiles culturales del mercado extranjero de turno, tasas legislativas, impuestos, aranceles, transporte y logística, etc. hasta los complejos y tortuosos trámites burocráticos.
Otro de ellos, y de suma importancia, se halla en los intermediarios, ya que suponen un alto coste a la hora de exportar productos y servicios. Entre otros factores, por la extensa cadena que implica el proceso. Esto, en última instancia, implica menor beneficio para el productor, que, a la postre, es el que más arriesga en todo ese entramado.
Con el objeto de reducir estos altos costes nace el Programa de Exportación Inteligente ‘Costa Rica Exporta’ de la Cámara Multilateral de Comercio y Cooperación Israel-Iberoamérica (CMCCII), institución que promueve las relaciones empresariales y culturales entre ambos territorios. Mediante esta iniciativa, que contribuye a reducir el coste de los intermediarios considerablemente en las exportaciones de productos y servicios, se consigue un incremento de los beneficios entre un 20% y un 35% en promedio al externalizar los trámites de nacionalización.
Se trata de un proyecto especialmente centrado en países latinoamericanos, permite a las empresas o instituciones de ese continente acceder con mayor facilidad al mercado europeo, así como al israelí, gracias a la alianza entre la Cámara y sus socios en Iberoamérica.
Además, este Programa de Exportación Inteligente incluye planes estratégicos de inserción, estudios de nicho de mercado, reglamentos, acceso a redes de clientes potenciales, canales de distribución, red de logística, etc. para que el exportador pueda comercializar con los países extranjeros sin necesidad de requerir la intervención de entes importadores y evitar los gastos e inversiones en infraestructura y personal, lo que reduce los costes operativos e incrementa los beneficios.
Esta es una propuesta de cooperación y contribución que ofrece la Cámara y la Oficina de Soporte y Promoción de Costa Rica especialmente diseñada para ayudar a todas las pequeñas y medianas empresas de Iberoamérica, con el objetivo de que puedan acceder de forma más eficientes a las oportunidades de mercado que ofrecen las economías del Estado de Israel y la Unión Europea.
Porque el verdadero compromiso de una Cámara que promueve las relaciones empresariales y culturales entre regiones debe ser proponer facilidades y proponer soluciones a aquellos que más lo necesitan.
El valor de una institución de esta índole se mide por este tipo de aportaciones. Y esta en concreto, tiene especial trascendencia en esta época de pandemia mundial. Basta asomarse a los datos: solamente en España, según los datos de comercio declarado de Aduanas, durante el primer semestre de 2020 las exportaciones se han reducido en un 15,8 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior. De hecho, el déficit comercial de enero a junio alcanzó los 7.573 millones de euros, un 48,5 por ciento menos que el registrado en 2019.
Apoyar a las exportaciones en este preciso momento, por tanto, es crucial para la economía y el consiguiente bienestar de cualquier país. Por eso, desde la Cámara Multilateral de Comercio y Cooperación Israel-Iberoamérica trabajamos firmemente para apoyar a las empresas en este delicado contexto y poder estar también junto a ellas en el momento de la recuperación. Que llegará.
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