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Como cooperativa líder de una de las principales industrias del mercado de alimentos, Dos Pinos alcanza sus siete décadas, ofreciendo a sus consumidores innovación constante no solo con productos de alto valor sino también con innovadores empaques y procesos.
La innovación inicia desde las fincas de sus 1.400 asociados productores hasta los productos que llegan al mercado para brindar nuevas experiencias al consumidor al momento de disfrutar la leche, el queso o los helados. Así han llegado últimamente al mercado por ejemplo helados con una alta dosis de creatividad al mezclar sabores con texturas, semillas, galletas, chocolates y sabores alicorados.
La vocación innovadora de Dos Pinos le permitió ser la primera pasteurizadora en el país, y hoy gracias esta tendencia produce más de 900 variedades de productos desarrollados de la mano de grandes líneas de investigación, tecnología y nutrición que requiere el consumidor actual.
Una de estas tendencias alimenticias son los amantes del deporte y de los estilos de vida saludable, para quienes se lanzó la nueva línea de productos Proteína Plus, que incluye variedad de yogures Griego, queso y leches deslactosadas y 0% grasa, que incorporan una alta cantidad de proteína en cada porción.
“En estos 73 años la cooperativa ha estado a la vanguardia con tecnologías innovadoras, para lograr un balance entre producción de la más alta calidad y el respeto hacia el medio ambiente”, comentó Luis Mastroeni, Director de Relaciones Corporativas y Sostenibilidad de la Cooperativa.
A lo largo de su historia la empresa ha marcado grande hitos con productos innovadores: así nacieron las leches enriquecidas con calcio, las bebidas funcionales, las leches descremadas y semidescremadas, la leche Delactomy y los yogurts enriquecidos con probióticos y prebióticos. Actualmente, Dos Pinos produce cerca de 900 productos gracias a la recolección diaria de 1.400.000 litros de leche 100 por ciento de vaca, que se someten a análisis de laboratorios debidamente acreditados, con certificaciones internacionales que le aseguran a los consumidores los más estrictos controles de calidad e inocuidad.
La innovación de la cooperativa también alcanza el medio ambiente. Durante estos años la empresa ha desarrollado diversos proyectos para reducir el impacto que generan los empaques.
Este 2020, la meta impuesta es reducir 74 toneladas de peso de sus empaques mediante proyectos de aligeramiento de los materiales y la reducción o eliminación de componentes plásticos.
Además, se migró hacia el uso de empaques amigables con el ambiente Tetra Brik® Aseptic Edge que emplea cartón proveniente de bosques manejados de forma responsable con la certificación FSC® (Forest Stewardship Council).
“Con un equipo multidisciplinario de profesionales en ingeniería de empaques, compras, gestión ambiental y sostenibilidad trabajamos para incorporar nuestras mejores prácticas en cada área y encadenar así nuevos productos con un impacto positivo en el medioambiente” detalló Mastroeni.
En cuanto al uso de botellas, la cooperativa envasa el 90% de sus refrescos en botellas de resina reciclada (RPET) y gestionamos responsablemente el 100% de los residuos generados del proceso post industrial.
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