Un estudio realizado en Costa Rica por la empresa Eco Market Research, da a conocer las creencias y comportamiento de la población respecto al cambio climático, considerado por los participantes del estudio como uno de los principales problemas de la actualidad y de un impacto cercano en su calidad de vida.
Un 60% de los consultados indicó que ha dejado de comprar algún producto por considerarlo contaminante; además, entre las acciones concretas que realizan con más frecuencia para contribuir con el medio ambiente se destaca la reducción del consumo eléctrico y de agua, así como la eliminación del uso de pajillas plásticas y el uso de bolsas reutilizables para sus compras.
La muestra se realizó en noviembre del año anterior, enfocada en esos aspectos con el fin conocer las creencias, percepciones y hábitos de los costarricenses relacionados con el cambio climático y sus consecuencias en el mercado. Para ello se realizaron 500 entrevistas a nivel de nacional, con personas de 13 a 78 años.
Los resultados de esta investigación permiten identificar ciertos riesgos y oportunidades para empresas y marcas. De ellas se espera no solo un compromiso y un comportamiento más responsable con el medio ambiente, sino que también se involucren y apoyen las actitudes eco-amigables del costarricense.
Entre las principales conclusiones del estudio están:
“El estudio muestra a una población con un buen nivel de compromiso con el medio ambiente, que demanda a las empresas y al gobierno que actúen de la misma manera. Los costarricenses están dispuestos a alzar la voz por el medio ambiente y exigen cambios tangibles; hoy, buscan activamente involucrar a otros en esta vía”, indicó Virginia Marchena, gerente de investigación de Eco Market Research.
Al señalar a los llamados a dar soluciones a esta problemática, más de la mitad de ellos considera que las empresas tienen un rol importante, aunque se reconoce que es un esfuerzo conjunto entre las personas, el gobierno y las empresas.
Esta presión que las personas están dispuestas a ejercer sobre las empresas es una tendencia que tiene el potencial de aumentar en el mediano plazo, haciendo que este comportamiento “verde” de las marcas deje de ser un diferenciador y se convierta en una característica exigida para competir en este mercado.
En el estudio se abordan temas tales como el nivel de involucramiento en diferentes acciones y conductas eco-amigables, las expectativas respecto a las empresas y el gobierno, así como las creencias respecto al cambio climático en general, el reciclaje y la reutilización de ciertos materiales. La consulta permitió evidenciar cambios en los patrones de comportamiento de la población, quienes señalan que, aunque actualmente sienten que hacen más en pro del medio ambiente, sus esfuerzos les resultan insuficientes para contrarrestar los efectos del cambio climático.
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