Últimas Noticias:
El 2020 revolucionó digitalmente la manera en la que muchos profesionales desarrollan sus labores. Pero además provocó el aumento en los ciberataques por debilidades en la red de internet que se utiliza para teletrabajar.
Datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC) muestran que en Costa Rica el número de teletrabajadores en el país aumentó de 21,524 en el 2019 a 282,632 personas en el 2020.
Esta realidad lleva a las personas a optar por movilizarse o visitar cafeterías, restaurantes, hoteles, residencias temporales, entre otros espacios. Esto con la intención de aprovechar las facilidades que el teletrabajo ofrece. Sin embargo, esto puede significar un riesgo si las empresas y sus colaboradores no están preparados para definir si la red de internet que utilizan para trabajo remoto es segura, de acuerdo con expertos en ciberseguridad.
“Este tipo de redes son las preferidas por los ciberdelincuentes pues les evitan la molestia de tener que vencer la seguridad. Usualmente, las redes compartidas no tienen contraseña o tienen una compartida que no se cambia. Es decir, una persona que estuvo hace 6 meses en una cafetería, hotel o residencia vacacional puede volver y conectarse de nuevo sin ningún problema”, comentó Mauricio Rojas, director de ventas Knogin Latam.
También existen redes Wi-Fi que presentan una pantalla de acceso que solicita registrarse para hacer uso del servicio sin costo. Estas pantallas son comunes y su objetivo principal es alimentar las estadísticas de uso del establecimiento. Pero también pueden ser utilizadas por atacantes, quienes crean una red con un nombre similar en espera de que usuarios descuidados se conecten y descarguen algún tipo de código malicioso.
Esta situación, señala Rojas, podría provocar que los datos, credenciales y comunicaciones sean capturadas durante el proceso de envío o descarga. Esto expone al colaborador y a la compañía a riesgos de divulgación de la información, acceso indebido y robo de datos.
Para Rojas, hay que partir del principio de que ninguna red ajena es segura.
“Por tanto, independientemente desde la locación de la que se conecte a los recursos corporativos, es necesario establecer un canal seguro de comunicación. Esto garantizará el mismo nivel de confidencialidad e integridad como si se estuviese físicamente en la oficina”, dijo.
Adicionalmente, se recomienda, deshabilitar cualquier proceso de sincronización del equipo. Así como mantener siempre el equipo actualizado, con el antivirus instalado correctamente y, si es posible, hacer uso de un cortafuegos (firewall).
Otra recomendación es preocuparse a la hora de navegar por páginas cuyos datos no viajan cifrados. Es decir, cuando la URL no empieza por https. Asimismo, no se debe iniciar sesión en ningún servicio mientras se esté conectado a esa red.
De igual forma, evitar realizar transacciones bancarias, compras online o cualquier otra tarea que suponga el intercambio de datos privados. Tras la conexión, elimine los datos de la red memorizados por nuestro equipo.
Finalmente, si no está seguro de la red de Internet que utilizará, lo mejor es utilizar la conexión del teléfono para navegar.
“En la actualidad, el teletrabajo se ha vuelto parte de nuestra día a día. Por eso es aún más relevante cuidar nuestra información y la de las organizaciones para las que trabajamos. Debemos siempre estar conscientes de los riesgos y peligros que existen cuando trabajamos fuera de nuestras oficinas. Procuremos buscar medios para proteger los equipos y cuidar quien está a nuestro alrededor en lugares públicos o en locaciones distintas a nuestra oficina u hogar”, finalizó Rojas.
Nuestras Redes Sociales: