Últimas Noticias:
La lactancia materna es una forma de facilitar el alimento para el crecimiento y el desarrollo de los bebés. Cuenta con innumerables ventajas no sólo para la salud del pequeño, sino también para sus mamás, según expertos.
Precisamente, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y Unicef recomiendan que la leche materna sea el alimento exclusivo de los bebés hasta los 6 meses de edad. Y, en lo posible, extenderla, al menos, hasta los 2 años. Esto en combinación con otros alimentos.
No obstante, aún existen ciertos mitos que repercuten en la lactancia materna. Según Kimberly-Clark, estos van desde la importancia de la lactancia materna para el bebé, hasta si duele, y a qué edad se debe dejar de realiza.
Expertos de Kimberly-Clark contestaron algunas de las principales dudas que hay sobre la lactancia materna.
Además de ser un gesto de amor que permite una conexión profunda con el bebé, la leche materna cuenta con todos los anticuerpos necesarios contra las enfermedades más comunes, por ejemplo, neumonía o diarrea. Además, las niñas y los niños que son alimentados con leche materna tienen menor riesgo de mortalidad en el primer año de vida.
Lo cierto es que cada proceso es único y algunas veces se requiere apoyo. La lactancia requiere práctica, tanto para las madres como para los bebés; además, se necesita un espacio tranquilo y el apoyo del entorno de la familia y del lugar de trabajo son claves.
Al iniciar el proceso es normal experimentar molestias, sin embargo, con el apoyo adecuado para posicionar el bebé y asegurar que esté correctamente agarrado al seno, se puede evitar el dolor en los pezones.
No es necesario, cuando los bebés nacen ya están familiarizados con los olores y sonidos de su madre. Los pezones tienen un aceite o grasa natural que los hidrata y protege, pero además las bacterias presentes en la piel pueden ayudar a desarrollar un sistema inmunológico saludable. Higienizar los pechos diariamente es suficiente.
Las madres que amamantan necesitan una dieta balanceada. Si bien los bebés están expuestos a las preferencias alimentarias de sus madres desde que están en el útero, las madres deben estar atentas a si su bebé presenta una reacción a un alimento en particular.
Hay varios factores que pueden afectar la producción de leche materna. Se ha comprobado que algunos factores que ayudan a una mayor producción de leche son iniciar la lactancia dentro de la primera hora del nacimiento, mantener contacto piel a piel entre la madre y el bebé, y poner de manera frecuente el bebé al pecho para amamantar (entre mayor sea la frecuencia de amamantamiento, será mayor la producción de leche).
No a todas las mujeres les resulta igual y hay otros factores que pueden incidir. En el caso de sentir que no se está produciendo suficiente leche para el bebé recomendamos pedir ayuda a un profesional.
Dependerá de la enfermedad de la que presenta la mamá. Es recomendable consultar a un profesional para que brinde su consejo en cada uno de los casos.
La lactancia no sólo beneficia a los bebés, sino también a las mamás. A corto plazo ayuda a su recuperación física, por ejemplo, disminuye el riesgo de hemorragia después del nacimiento y reduce el riesgo de depresión post-parto.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las mujeres que amamantan tienen un 32% menos de riesgo de tener diabetes tipo 2, un 26% menos de riesgo de tener cáncer de mama y un 37% menos riesgo de tener cáncer de ovarios.
El hecho de que existan mamás que no amamanten no significa que sea algo negativo, cada caso es único. Es importante asesorarse con algún experto en lactancia y también considerar las circunstancias en cada caso. Amamantar es una experiencia singular y única para cada mamá; el contacto piel a piel, intercambiar miradas y abrazar a tu bebé fortalecerá el vínculo afectivo y le dará mayor seguridad emocional.
No hay evidencia de que sea más difícil dejar de amamantar después de un año, pero sí hay evidencia de que amamantar hasta los dos años es beneficioso, tanto para las madres como para los niños. Todas las madres y los bebés son diferentes y cada caso es único.
Muchas madres continúan amamantando después de volver al trabajo. Recomendamos verificar las políticas del país y del lugar donde trabaja. Si tiene derecho a un horario y un lugar para amamantar durante las horas de trabajo, si es posible poder ir a casa y amamantar, pedirle a un familiar o amigo que le traiga a su bebé o que se extraiga la leche y se la lleve a casa.
Si no tienes la opción de amamantar durante las horas de trabajo, busca momentos durante el día para extraerte la leche y luego alimenta a tu bebé directamente cuando estés en casa. Aunque no puedas amamantar directamente, siempre es bueno continuar amamantando cuando estés con tu bebé.
La nutricionista Katherine Ash, de la Universidad Latina de Costa Rica, añadió que no necesariamente la lactancia materna se debe frenar a cierta edad.
“No existen recomendaciones sobre un límite superior para finalizar la lactancia. Ningún estudio ha logrado encontrar que la lactancia materna prolongada implique algún riesgo físico o psicológico en niños que toman pecho por encima de los dos o tres años. Tampoco existe evidencia que la lactancia prolongada esté relacionada con la malnutrición o la aparición de caries en los niños”, dijo Ash.
Añadió que, para la madre, a corto plazo le ayuda a su recuperación física después del parto. Así como a disminuir riesgo de hemorragia y depresión posparto.
“Entre mayor tiempo de lactancia se ha visto que hay un menor riesgo de diabetes tipo 2. Así como cáncer de mamá, cáncer de ovario, hipertensión e infarto de miocardio. Si bien es cierto las mujeres durante la lactancia tienen un requerimiento energético mayor, no necesitan una dieta especial. Muchas personas creen que es necesario consumir alimentos especiales en esta etapa. Sin embargo, se sabe que con solo llevar una dieta equilibrada y variada es suficiente”, aseguró la nutricionista.
Por su parte, la obstetra de la Universidad Latina de Costa Rica, la Dra. Evelyn Salas, reiteró que es importante respetar lo que la mujer desee hacer en el proceso de amamantar. Esto ya que la lactancia es una decisión que implica constancia, sacrificio, cuidados y apoyo por parte del vínculo familiar o círculo de amigos, concluyó.
Nuestras Redes Sociales: