Preservar la riqueza natural de Costa Rica conformada por una gran variedad de flora y fauna, es uno de los objetivos del Hotel El Silencio Lodge para este 2021. Para esto, ha implementado 3 proyectos de interés ambiental para aportar a la preservación del bosque nuboso en el cual está ubicado.
Francisco Hidalgo, sustainability manager de El Silencio Lodge, explicó que los planes tienen el objetivo de contribuir a proteger este tipo de bosque y su ecosistema, así como la reproducción de las especies animales y vegetales que cohabitan en este lugar.
“El primero de los planes es una alianza para la siembra de árboles específicos para este tipo de bosque, el segundo es un Meliponario y un tercero es un jardín de colibrís”, explicó Hidalgo.
El primer proyecto, forma parte de una alianza estratégica entre el hotel y la Liga de Comunidades Unidas en Conservación del Agua (Liga CUENCA).
Esta alianza consiste en que la Liga CUENCA dotará al hotel de 200 árboles nativos de bosque tropical nuboso durante un año. El hotel los sembrará en su reserva para preservar el ecosistema existente, explicó Randall Varela Chávez, coordinador de proyectos de la Liga CUENCA.
“Con la siembra de estos árboles se ayudará a mantener el hábitat que conforma un bosques”, comentó Hidalgo.
También, agregó, estos árboles contribuirán con la filtración del agua y desarrollo de la biodiversidad que vive en el suelo como las lombrices o los microorganismos de montaña.
Las especies sembradas serán: ratoncillo, jaúl, dama, distintos tipos de aguacatillo, cacho de venado, burio, roble, cedro, yos, güitite, manzanita, guayabilla, capulín, cuajiniquil, targuá, pizarrá, guacamayo, lloró barcino, pocora, murta, gaulín, huesillo.
El segundo proyecto es un Meliponario, que es un espacio que reúne 6 colmenas de abejas, para dos especies diferentes, de abejas sin aguijón. Estas especies son Jicote Barcino de las más grandes de Costa Rica y la otra es de Picusaro; y son endémicas del bosque nuboso.
“El objetivo de contar con este Meliponario es la reproducción de estos dos tipos de abejas, para su conservación, ya que por el cambio climático están siendo amenazadas; y a la vez, ellas contribuyen, por medio de la polinización, a la supervivencia de ecosistemas y a la reproducción de los árboles y plantas del bosque nuboso”, comentó Hidalgo.
El tercer proyecto, es un Jardín de Colibríes, el cual alberga 6 especies de colibríes, los cuales se alimentan de plantas tropicales como Heliconias, Caña Agria, Platanilla, Rabo de gato, Mañanita, Avecilla, Lantana, Orquídeas, entre otras.
“Finalmente, este jardín no sólo reúne colibris, sino también abejas y mariposas, quienes ayudan con la polinización y la reproducción de más flora, del bosque nuboso; y es un espacio para que estas especies obtengan una fuente de alimento”, concluyó Hidalgo.
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