El confinamiento y la pandemia han generado afectación en la salud emocional de los jóvenes y adultos. Lo que ha provocado que las relaciones familiares se vean afectadas.
De acuerdo con el Colegio de Profesionales en Orientación (CPO) la educación combinada, llevar la oficina y la escuela al hogar, el distanciamiento físico, el confinamiento en las casas. Además de las nuevas medidas y restricciones vehiculares y de horario a causa del reciente incremento de casos en el país, son algunas acciones que afectan la salud emocional de las familias.
“La familia es muy importante para nuestro desarrollo integral. Cada una es diferente. Pero todas tenemos fortalezas y recursos, aunque debilidades y diferencias. Es importante que fortalezcamos lo que nos une y nos hace familia”, explicó la Dra. Ruth Villanueva, vocera del CPO.
Para lograrlo, Villanueva recomendó algunas acciones:
Por su parte, la Fundación Daniel, comentó que los jóvenes se enfrentan a un mundo en constante cambio. Así como a un ritmo acelerado y a una sociedad más demandante. Siendo esto una presión continua para ser aceptado o encajar en ciertos grupos sociales, poniendo en riesgo la salud mental y física.
Precisamente, señaló la Fundación, la ansiedad es uno de los padecimientos más comunes en adolescentes entre los 10 y los 19 años. Y a eso se le suma el estrés, los cambios de humor, problemas alimenticios, entre otros.
“El construir espacios de confianza entre padres e hijos, la actividad física, la buena alimentación como inversión en su salud a largo plazo. Además de realizar actividades que ayuden a canalizar la energía y creatividad, son algunas de las prácticas que ayudan a que los jóvenes puedan vencer alguna adversidad interna por la que están luchando”, comentó la psicóloga Josymar Chacín.
Agregó que cuando el adolescente está pasando por momentos difíciles es importante ponerle atención a ciertas señales o síntomas. Esto para poder trabajarlos o buscar ayuda de un profesional.
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