El gran reto de IoT es la ciberseguridad, señalan expertos

Debido a la rápida transformación digital, el Internet de las Cosas (IoT) está experimentando una expansión acelerada. Ante ello, de acuerdo con diversos expertos, se genera un gran riesgo. Este es la ciberseguridad.

De acuerdo a los investigadores de Check Point, en los primeros dos meses de 2023 se ha visto un aumento del 41% en la cantidad promedio de ataques semanales por organización dirigidos a dispositivos IoT. Ello en comparación con 2022, a nivel mundial.  Además, en promedio, el 54% de las organizaciones fueron objeto de estos intentos de ataque. Esto con un promedio de casi 60 ataques por organización por semana dirigidos a dispositivos IoT.

Para Joey Milgram, gerente general de Soluciones Seguras en Costa Rica, la falta de medidas adecuadas de ciberseguridad en muchos de estos dispositivos los convierte en objetivos atractivos para los ciberdelincuentes. Los cuales buscan acceder a información confidencial o comprometer la seguridad de las redes.

Milgram comentó que, entre los dispositivos IoT atacados se encuentran los enrutadores. Además de cámaras IP, DVR, NVR, e impresoras. Los parlantes y cámaras IP, se han vuelto cada vez más comunes en entornos de trabajo y aprendizaje remotos.

“La ciberseguridad de los dispositivos conectados es esencial para proteger la privacidad y seguridad de los usuarios. Así como para garantizar el correcto funcionamiento de las empresas. Todos los actores involucrados, desde los fabricantes hasta los usuarios y los reguladores, deben tomar medidas para garantizar la seguridad de estos dispositivos. Así como de la información que manejan”, comentó Milgram.

Ciberseguridad en dispositivos IoT

Estas son algunas recomendaciones que brindó Milgram para mejorar la ciberseguridad en los dispositivos IoT.

• Adquirir dispositivos IoT de marcas reconocidas que prioricen la seguridad.
• Capacitar a todos los colaboradores en materia de ciberseguridad y concientizarlos de los peligros de la red.
• Practicar políticas de complejidad de contraseñas y usar la autenticación multifactor (MFA) cuando corresponda.
• Garantizar que los dispositivos conectados estén actualizados con el software más reciente y mantener un buen estado del dispositivo.
• Mantener actualizadas las aplicaciones y antivirus.
• Hacer cumplir los perfiles de acceso a la red de confianza cero para los activos conectados.
• Separar las redes para TI e IoT cuando sea posible.
• Llevar un inventario de los dispositivos.

Marielos Rosa, gerente de Operaciones de Eset Centroamérica, añadió que “actualmente son muchos los tipos de amenazas que se encuentran propagándose y afectando a usuarios. Si bien el término antivirus es utilizado para reconocer al software que identifica este tipo de amenazas, las herramientas han evolucionado. Pasaron de detectar solamente virus informáticos a convertirse en soluciones de seguridad completas. Estas proveen muchas otras funcionalidades como firewall, filtros antispam y antiphishing o protección de operaciones bancarias, entre otras”.

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