Por: Donald Quesada
Presidente Caja de ANDE
Acercándonos a la primera celebración oficial por ley de la abolición del ejército en nuestro país, recordamos con orgullo cómo los soldados militares se transformaron en soldados académicos, al trasladar los recursos que se utilizaban para la guerra, al fortalecimiento de los educadores costarricenses.
Fue así como desde 1948, las filas de nuestro ejército están llenas de luchadores con un objetivo distinto: impulsar el progreso social y económico de Costa Rica.
Este 22 de noviembre celebramos el Día del Educador Costarricense, una fecha sumamente especial para Caja de ANDE pues conocemos muy de cerca el esfuerzo y vocación de estos trabajadores en los centros educativos.
Este año, la conmemoración se vuelve aún más emotiva e importante, pues si bien es cierto, con la llegada del COVID-19 todo el país experimentó un cambio, uno de los grupos más afectados han sido nuestros estudiantes.
Y detrás de ellos hemos visto a nuestros maestros y profesores, tratando de, en la medida que sea posible, seguir llevando la formación correspondiente a sus alumnos. Esto a pesar de diferentes obstáculos como la falta de acceso a internet, pocos recursos económicos o afectaciones en su salud.
No podemos pasar por alto este último ámbito. Gracias a nuestro programa de ayudas solidarias, hemos contabilizado a unos 1280 accionistas contagiados con COVID y sabemos que existe otra cantidad importante que presentan padecimientos del sistema nervioso que van desde eventos cerebro vasculares hasta deterioros cognitivos y demencia. Destacan también enfermedades del sistema respiratorio, cardiovascular y endocrinos. Además de padecimientos gastrointestinales, musculares, mentales y tumores.
Por otra parte, sabemos que para nuestro cuerpo de docentes, ha sido doloroso perder la comunicación con por lo menos 91.000 alumnos, que según un censo realizado por el MEP abandonaron el sistema educativo en el periodo de pandemia.
Todo esto ha significado por lo menos tres años de rezago en la educación, como también lo dio a conocer el programa Estado de la Nación, recientemente.
Como parte del Magisterio Nacional, nos unimos al pesar que sabemos que están pasando y hoy más que nunca, queremos resaltar su valor para el país y decirles que estamos a su servicio.
Desde nuestros programas de ahorro, financiamiento y seguros, a lo largo de 76 años nos hemos preocupado por ofrecerles las mejores condiciones del sistema financiero, gracias a nuestro modelo solidario que ha sido exitoso.
También, trabajamos a diario para maximizar nuestros recursos, manteniendo una fuerte política de cuidado ambiental y un sólido programa de responsabilidad social.
Y así seguiremos luchando en cualquier instancia por la defensa de los intereses de nuestros accionistas en general.
Los educadores están acompañados por otros valiosos trabajadores en las escuelas y colegios: personal administrativo, conserjes y oficiales de seguridad, entre otros; sin su aporte la labor educativa no podría ser posible.
El homenaje se hace extensivo a nuestros maestros y profesores pensionados, quienes han abierto el camino y brindaron su gran esfuerzo a quienes hoy impulsan al país.
Seguimos extrañando con nostalgia las risas de los estudiantes entre pasillos, sus abrazos cariñosos y los actos cívicos donde nos reuníamos todos como una sola institución, mientras tanto, podemos estar seguros de que el actual ejército sigue en pie de lucha por Costa Rica.
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