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Por: Alonso Elizondo
Director ejecutivo de la Cámara de Comercio de Costa Rica.
Desde la Cámara de Comercio de Costa Rica hemos sido consistentes en proponer acciones y medidas que contribuyan a combatir la crisis fiscal y económica que atraviesa el país, que ha impactado fuertemente a la economía y al sector comercial en particular.
Según datos del Banco Central de Costa Rica, desde la caída de la actividad económica en marzo pasado, el crecimiento se ha mantenido negativo. La mayor contracción se dio en el mes de julio, sin embargo, en octubre (último dato), la cifra aún es más negativa (-6.6%) que la experimentada en marzo (-6.2%).
La caída de la actividad comercial fue aún mayor a la contracción económica en general. El crecimiento comercial se contrajo en -15,1% en abril del 2020 y desde ese momento la recuperación ha sido muy lenta, casi nula. En octubre del 2020 (último dato) el IMAC fue de -13,9%.
Desde el sector Comercio hemos sido consistentes en proponer acciones que preserven el empleo y hemos sido enfáticos en mantener una apertura sostenida, respetando los lineamientos sanitarios. que permita a las empresas normalizar sus operaciones.
Gracias al período de apertura, los signos de recuperación económica y comercial, se han podido observar, pero a un paso muy lento. Noviembre y diciembre del 2020 fueron meses con mejor actividad comercial, que los anteriores, pero sin llegar a igualar los índices de noviembre y diciembre del 2019.
La pandemia provocó un impacto directo en el desempleo alcanzando la cifra del 24,4% en julio del 2020. Debido a la apertura comercial gradual, se logró reducir en más de un punto porcentual por mes, llegando al 23,2% en agosto y al 22% en el mes de setiembre. Sin embargo, el desempleo no disminuyó de manera significativa en octubre (21,9%), lo que evidencia la necesidad de implementar mayores medidas de reactivación económica.
Lamentablemente las empresas formales aún continúan recibiendo los efectos negativos de esta crisis económica y sanitaria:
Entre el primer y segundo semestre del 2020, el empleo formal disminuyó hasta una tasa de -10% y el informal hasta un -33%. Entre el segundo y tercer trimestre del 2020, el empleo informal se recuperó en un 19% pero el empleo formal continúo descendiendo, esta vez al -3%.
Con este panorama la informalidad es el único camino que encuentran los costarricenses afectados para generar ingresos, por lo que desde la Cámara de Comercio hemos insistido en que la solución NO está en crear nuevos impuestos, sino más bien en la implementación de medidas que reactiven la economía como:
Fuente de los datos: Banco Central de Costa Rica (BCCR), Instituto Nacional de Estadística y Censos de Costa Rica (INEC).
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