Por: Carla Murillo, Regional Nutrition Manager de Griffith Foods.
La familia, en todas sus formas, sigue siendo uno de los espacios más poderosos para generar bienestar, construir hábitos y compartir valores. En el marco del Día Internacional de las Familias, Griffith Foods propone reflexionar sobre un acto tan cotidiano como revelador: la alimentación en el hogar.
Más allá de lo que se sirve en el plato, comer en familia es una oportunidad para reconectar, enseñar, cuidar y acompañar. La nutrición no empieza en la fábrica ni termina en la cocina. Comienza mucho antes, en las decisiones que cada familia toma al elegir qué consumir y cómo compartirlo, y continúa en el impacto que esas decisiones tienen tanto en la salud como en el entorno.
La nutrición se construye en el hogar, y las familias son el núcleo de consumo diario. Las decisiones que tomamos como familia, sobre qué comemos, cómo cocinamos y cómo compartimos los alimentos, influyen directamente en nuestra salud y en la del planeta.
Desde su rol como empresa alimentaria, Griffith Foods impulsa una visión de la nutrición familiar como un proceso integral. Este enfoque no se limita a los productos, sino que abarca la educación, la sostenibilidad, la cultura local y el acceso justo a opciones saludables en pro del bienestar del consumidor. A través de acciones de sensibilización interna, políticas de innovación responsable y criterios nutricionales exigentes, la compañía busca contribuir al cambio de fondo que requiere el sistema alimentario actual.
Uno de los desafíos, está en reconectar a las personas con el acto de alimentarse como algo que va más allá del sabor o la conveniencia. La cocina en familia puede convertirse en un espacio de diálogo, de aprendizaje, de afecto. Enseñar a niños, adolescentes o adultos mayores a reconocer el valor de los alimentos y la forma en que estos se preparan y se comparten, también es construir salud pública.
La estrategia de la compañía en materia de nutrición familiar se expresa tanto en sus soluciones alimentarias como en su cultura corporativa. Desde el desarrollo de productos con criterios de reducción de ingredientes críticos (sodio, azúcar, grasas saturadas) hasta el diseño de propuestas nutritivas accesibles para poblaciones en situación de vulnerabilidad, Griffith Foods busca atender las distintas realidades familiares, sin perder de vista la sostenibilidad como eje transversal.
En paralelo, su marca propia para foodservice y retail, Custom Culinary® ha jugado un papel clave al traducir estos principios en productos versátiles, prácticos y alineados con las tendencias de sabor.
En este Día Internacional de las Familias, Griffith Foods celebra el vínculo afectivo que une a las personas y su fuerza transformadora. Porque en cada mesa familiar se gesta, de forma silenciosa pero poderosa, el futuro de la salud individual, colectiva y ambiental.
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