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El país enfrenta un panorama en el que cientos de costarricenses esperan con ansias su turno para recibir la vacuna contra el Covid-19. Sin embargo, una parte de la población y colaboradores se niegan por diferentes razones a ser vacunados. Esto por miedo a las reacciones que puedan tener, efectos secundarios y hasta la incredibilidad de la pandemia, entre otros.
Ante esto, expertos señalan que los patronos deben tomar en consideración varios aspectos importantes. Esto para no afectar la operación de su empresa y prevenir conflictos legales.
Lupita Quintero, especialista en Derecho Laboral de Nassar Abogados, enfatizó que existe la posibilidad de que muchos colaboradores, en especial aquellos que trabajan de forma presencial, se sientan inseguros de un posible contagio.
“Los patronos se pueden exponer a diferentes escenarios en caso de que no se sigan los lineamientos emitidos por el Ministerio de Salud. Está la posibilidad de que algunos colaboradores tomen la decisión de renunciar. Sin embargo, la base que tendría el empleado para finalizar la relación laboral no puede referirse en específico a la presunta no vacunación de sus compañeros de trabajo. Sino a que el trabajador compruebe que existe un problema de salud para él y su familia por las condiciones higiénicas del lugar de trabajo. E incumplimiento de medidas de prevención y seguridad”, explicó Quintero.
Agregó que, por ello, previo a dar por terminada la relación laboral, se recomienda que el colaborador solicite al patrono cumplir con la obligación omitida. En caso de comprobarse la falta por parte del patrono, el empleado tiene el derecho de que le reconozcan el pago de su liquidación. Como si tratase de un despido.
Quintero señaló que los patronos deben velar porque todos los colaboradores estén cumpliendo con la implementación de protocolos. Esto independientemente de la actividad que se realice.
“De no hacerlo, las empresas se expondrán a multas y suspensión del permiso de funcionamiento”, dijo Quintero.
Agregó que “el patrono puede exponerse a una orden sanitaria. E inclusive suspender el permiso de funcionamiento y el inicio de un proceso por infracción a las leyes laborales y conexas. Esto puede implicar una multa de 1 a 23 salarios base (₡462.200) dependiendo de la gravedad de la falta. Así como el número de empleados afectados y reiteración”.
Para la experta, es importante que tanto colaboradores como empleadores deben acatar los lineamientos establecidos por las autoridades de salud. Esto para evitar despidos y cierre de sus operaciones.
Quintero enfatizó que la recomendación en torno a la aplicación de sanciones a los trabajadores en caso de negativa a vacunarse se sustenta en la obligatoriedad de la misma para este grupo de trabajadores. Además de que el Covid-19 es considerada una enfermedad/riesgo del trabajo. Por esto los colaboradores están sujetos a atender las medidas de salud ocupacional correspondientes. Entre ellas, la aplicación de la vacuna.
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