Hace un año, la situación sanitaria global desafió a las personas a cambiar su modo de vida de manera radical. No solo las dinámicas familiares y de empresas migraron a la virtualidad. Sino que la sociedad se dio cuenta de la importancia de adoptar medidas que garanticen tanto la salud física como mental de las personas.
Pero, ¿cómo se puede lograr este balance? Para Kimberly-Clark este es un elemento fundamental en sus operaciones. Debido a esto brinda 4 recomendaciones que ha implementado en su estrategia para lograrlo.
La primera es la flexibilidad. De acuerdo a su experiencia, las empresas deben apoyar y proporcionar entornos de trabajo que incentiven a los empleados a disponer su tiempo productivo en las prioridades críticas. No solo se deben enfocar en el fortalecimiento de los procesos. Se debe prestar especial atención a la inversión en el autoaprendizaje.
La segunda recomendación es la inclusión y diversidad. En este punto, transformar la cultura y establecer una mentalidad abierta al cambio es importante. Esto para que todos los colaboradores se sientan empoderados a idear, innovar y contribuir al crecimiento empresarial. Además, mejorar la diversidad de la fuerza laboral con nuevas iniciativas para atraer, retener y desarrollar el mejor talento también es clave.
El tercer punto es las nuevas tecnologías y recursos. Acá Kimberly-Clark señaló que para las empresas deben crear herramientas es útil. Siempre para impactar positivamente a los trabajadores de todos los niveles. Estos instrumentos desbloquean la innovación y aumentan la productividad al convertirse en apoyo para establecer las mejores prácticas.
Finalmente, potenciar la comunidad; es decir, la cultura organizacional, concluyó la empresa.
Nuestras Redes Sociales:
