10 consejos para fomentar la educación financiera en la niñez

Un total de 961,437 personas en Costa Rica son niños entre 0 y 12 años. Esto representa un 18,4% de la población total del país, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censo (INEC). Para especialistas, ésta es la edad ideal para iniciar con la educación financiera y los primeros ahorros.  

Sin embargo, una pregunta frecuente que se hacen los padres y madres de familia en sus hogares es ¿Cómo hablarle de finanzas a los hijos pequeños? Pero que también comprendan la importancia del manejo responsable del dinero.

Los expertos coinciden que el primer paso es ser paciente y constante. Esto cuando se aborda el tema de la educación financiera con los niños.

Para ello, afirman, lo conveniente es establecer una relación saludable con los recursos disponibles. Es decir, enseñar a utilizar lo que se gana de forma responsable y previsoria.   

Kimberly Quesada, gerente de Captación de Coopenae, asegura que la enseñanza del manejo del dinero depende de la edad.

“En cada etapa hay que reforzar conceptos que sumen al conocimiento financiero y la eficiente administración del dinero. El objetivo es establecer bases sólidas desde una edad temprana. Para edades maternas, entre los 0-6 años, se debe enseñar a identificar monedas, contar dinero, entender el concepto de intercambio y fomentar el ahorro. En las edades escolares, entre los 7-12 años, se recomienda enseñar a elaborar un presupuesto simple. También establecer metas concretas de ahorro, diferenciar entre necesidades y deseos”, explicó Quesada.  

Aseguró que, en el caso de los preadolescentes, para su educación financiera se recomienda abrir una cuenta corriente en una institución financiera. Además de perfeccionar las habilidades en la elaboración del presupuesto, introducir conceptos de inversión. 

Recomendaciones para impulsar la educación financiera

1. Enseñe a una edad temprana: responda a las preguntas de los niños sobre el dinero, utilizando un lenguaje y ejemplos adecuados a su edad. Evite términos financieros complejos. 
2. Refuerce conceptos financieros: utilice juegos, hágalo divertido. 
3. Eduque sobre el valor del ahorro: permítale gestionar su dinero bajo supervisión, una herramienta puede ser una mesada semanal o mensual. 
4. Enseñe la diferencia entre deseo y necesidad: use ejemplos como la comida y la ropa como necesidades y los juguetes o golosinas como deseos. 
5. Muestre ejemplos sobre decisiones financieras: utilice situaciones cotidianas. Puedes usar como ejemplo la mesada mientras explora el concepto de presupuesto, acá puede explicar que es un plan para administrar el dinero.    
6. Enseñe al niño a dividir el dinero en tres categorías: ahorros, gastos necesarios y gastos para cosas que deseen, pero no se necesitan. 
7. Brinde responsabilidad financiera gradual conforme van creciendo, bajo supervisión. 
8. Invite al niño a compartir en familia los procesos de compra: para que aprenda a comparar precios y practicar sobre las decisiones de compra, involúcrelo en acciones pequeñas.  
9. Hable sobre metas financieras a mediano o largo plazo: ejemplo como ahorrar para su educación. 
10. Sea un buen ejemplo de un administrador eficiente del dinero: los menores aprenden mucho observando a los adultos, así que asegúrese de que sus propios hábitos financieros sean un buen referente.

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