Últimas Noticias:
Por Mariana González de la Viña
Líder de Inteligencia y Ciberseguridad para México & Centro América
Sabemos que el mundo se está moviendo hacia una realidad cada vez más digital y conectada, generando más competitividad en este nuevo ecosistema. Hoy en día, la pantalla del teléfono celular se ha convertido en un gran mostrador, en el que los clientes pueden, en unos clics, realizar sus compras, ya sea prendas de vestir, libros, productos de belleza, viajes, entre otros innumerables productos y servicios.
Esta es una modalidad de consumo reciente y que ya presenta en América Latina, un crecimiento mucho más acelerado que el de las compras tradicionales realizadas de forma presencial en tiendas, mercados y centros comerciales.
La digitalización y la omnicanalidad no son nuevos para los comercios. Lo que vemos hoy es que se ha ido convirtiendo en parte de la rutina de la mayoría de los consumidores, que amplían cada vez más la variedad de productos comprados a través de canales digitales (comenzando con libros, pasando por boletos aéreos, artículos de maquillaje, electrodomésticos, ropa y ahora también haciendo compras semanales en supermercados). Al punto que se espera que en un corto período de tiempo, las compras digitales superen las realizadas en persona en las tiendas, con tarjeta física.
Este tipo de compra ha tenido una gran aceptación por parte de los consumidores y está aquí para quedarse: la investigación de Mastercard en asociación con Kantar publicada en diciembre pasado, mostró que Brasil es el líder del consumo en línea en América Latina, lo que demuestra que el 15% de la población compra por medio de comercio electrónico cada 3 días o menos. Otro 21% compra una vez a la semana y otro 12% compra al menos una vez cada dos semanas.
Tales cambios de comportamiento traen un desafío para los comercios: como saber si la persona haciendo la transacción es el dueño de la tarjeta, o si se trata de un defraudador.
Por esta razón, tenemos la misión de crear procesos seguros que permitan a los comercios mejorar las tasas de aprobación y reducir el fraude logrando un nivel de desempeño similar al del entorno físico. Nuestro gran desafío como industria es llevar la seguridad de los pagos físicos al entorno en línea. Estas medidas asegurarán que las empresas expandan cada vez más su presencia en línea, contribuyendo también a su expansión en el mercado local.
En esta misión de mejorar el desempeño del mundo digital y combatir el fraude, debemos considerar un componente importante: la experiencia de compra ofrecida a los usuarios debe ser lo más cómoda e intuitiva para evitar el abandono de la transacción.
El mercado aún está probando las mejores estrategias para lograr un buen equilibrio entre las acciones de prevención y seguridad y los sitios web / aplicaciones intuitivos y fáciles de usar, siendo un momento crucial para que el comerciante se diferencie de los competidores. La usabilidad de estas plataformas será un factor decisivo en la competitividad del mercado a partir de ahora.
Precisamente para resolver este desafío, EMVCo lanzó un protocolo de seguridad capaz de apoyar el crecimiento del comercio electrónico. En su segunda versión, el protocolo EMV 3DS ofrece un enfoque diferenciado para el comercio digital, que combina el intercambio de datos entre el comercio y el emisor para aumentar la asertividad del proceso de autenticación, lo que resulta en una menor ocurrencia de fraude y mejores niveles de aprobación de compra.
En comparación con la primera versión, 3DS 2.0, es capaz de procesar una cantidad de datos diez veces mayor para cada usuario, además de ser más versátil, con aplicación también para dispositivos móviles. Esta es la apuesta principal para que las compras en línea alcancen un nivel de aprobación similar a las practicadas en el entorno físico, que han pasado por un proceso histórico de mejora de sus mecanismos de seguridad, con una tasa de aprobación del 95% en la actualidad. Y, toda la cadena ya se ha dado cuenta de la efectividad del protocolo.
Hoy, el país está experimentando un movimiento para acelerar la implementación de EMV 3DS , con un fuerte apoyo entre los propios bancos y comercios , que han reconocido los beneficios de la tecnología en los resultados financieros de sus negocios. También vale la pena mencionar el hecho de que el EMV 3DS libera a los comercios de la responsabilidad de fraude.
Al permitir procesos de autenticación profundos e invisibles, 3DS 2.0 garantiza que las tiendas en línea reduzcan la fricción en el proceso de compra, lo que resulta en un entorno más seguro y a prueba de fraude, además de ofrecer una mejor experiencia del usuario, uno de los elementos con una percepción creciente del valor en el mercado.
En este escenario, Mastercard está apostando y trabajando para expandir la adhesión de herramientas de seguridad más sofisticadas, que son fundamentales ya que garantizan la optimización de los procesos de autenticación de pagos en línea, además de proporcionar mejoras en la experiencia de consumo.
Nuestras Redes Sociales: